Dedica unos minutos por la mañana para meditar, respirar profundamente o simplemente disfrutar una taza de té o café sin distracciones.
Planifica tu día con una lista de prioridades, esto reduce la sensación de estar abrumado.
Cuando sientas estrés, haz una pausa y respira profundamente: inhala por 4 segundos, mantén el aire por 4 segundos y exhala lentamente por 6. Esto calma tu sistema nervioso.
Escucha música relajante o simplemente desconéctate durante unos minutos